Mi abue, de 94 años, fue una mujer ejemplar. A través de los años de su vida vivió experiencias que forjaron su temple y su carácter. Ella, que platicaba conmigo en Mixe, recordaba lo tiempos en los que trabajaba en el campo, los momentos en los que subía y bajaba con mucha energía, y los momentos en los que las golosinas, las frutas y algunos alimentos eran su delirio, con el tiempo, eso cambia, me decía.
Mi abue me enseñó que ante momentos de adversidad hay que pensar en que eso terminará, que ante momentos de angustia, se debe sacar fuerzas para seguir adelante y que no me preocupara por salir a recorrer el mundo, ella siempre me esperaría. Un día, diciéndole que iba lejos, hasta el otro lado del mundo, me dijo, ya sé a donde vas hijo, vas a aquel lugar en donde será de noche cuando aquí sea de día, en donde será de día cuando aquí sea de noche, no te preocupes la gente que está por allá también come, rie, canta y baila, solo que están lejos. A lo mejor no comen maiz, pero son gente eso no lo olvides, ve sin preocuparte que yo seguiré aquí. Aquél día salí rumbo a Turquía sin preocuparme y con la frente en alto, mi abue me había dado un consejo que atesoro desde entonces.
Mi abue me enseñó la conformación de lo nombre en mi pueblo, la distribución de la tierra y cómo esta fue dispuesta y creada por el dador de la vida, me enseñó que siempre hay que vivir con alegría y con pasión. Me enseñó ha orar en Mixe, me enseñó a perdonar, me enseñó a caminar en la vida con la frente en alto. Me dió tantas enseñanzas, a vivir en libertad, a compartir, a confiar en la gente a tener una esperanza en la humanidad.
Mi abue ante dudas y cuestiones de la existencia misma tenía siempre una respuesta adecuada, no te preocupes, no le pienses mucho, ve y trabaja, ve y viaja, ve y conoce, ve y comparte, en resumen ve y vive.
Ahora que ha partido, siento dolor en el alma, pero también siento mucha alegría y felicidad por los momentos vividos, por las risas compartidas, las historias heredadas, los aprendizajes de vida ejemplares, las grabaciones de los videos que le realicé, las canciones cantadas, los momentos de plática y reflexión profunda, las celebraciones de año nuevo, la valentía en los momentos de angustia y dolor...
"Estuviste aquí donde reiste, donde aconsejaste, donde fuiste autoridad, donde fuiste hija, donde fuiste madre, donde trabajaste, donde viajaste. Hoy que el dador de vida te ha llevado y ha solicitado tu presencia, que te reunas con tus ancestros, con nuestros ancestros, con los que se nos adelantaron. Que los sueños contigo no nos atormenten, no nos castiguen en esta vida. Perdónanos y olvida las onfensas que quizá cometimos contra tí, las malas palabras, las malas acciones, las malas ideas. Cuidanos y en algun momento también nos reuniremos contigo. Hoy que te entregamos a la tierra y al universo, que te acoge en su regazo, que te reuna con los que quisiste y conociste. Ve en paz, nosotros nos quedamos un tiempo más, lo que el dador de vida no otorgue, aquí te recordaremos siempre y en los días de tus fiestas, llega a la casa con tus compadres, comadres, allí te tendremos un lugar para todos. Nos volveremos a encontrar"
Mi abue me enseñó que ante momentos de adversidad hay que pensar en que eso terminará, que ante momentos de angustia, se debe sacar fuerzas para seguir adelante y que no me preocupara por salir a recorrer el mundo, ella siempre me esperaría. Un día, diciéndole que iba lejos, hasta el otro lado del mundo, me dijo, ya sé a donde vas hijo, vas a aquel lugar en donde será de noche cuando aquí sea de día, en donde será de día cuando aquí sea de noche, no te preocupes la gente que está por allá también come, rie, canta y baila, solo que están lejos. A lo mejor no comen maiz, pero son gente eso no lo olvides, ve sin preocuparte que yo seguiré aquí. Aquél día salí rumbo a Turquía sin preocuparme y con la frente en alto, mi abue me había dado un consejo que atesoro desde entonces.
Mi abue me enseñó la conformación de lo nombre en mi pueblo, la distribución de la tierra y cómo esta fue dispuesta y creada por el dador de la vida, me enseñó que siempre hay que vivir con alegría y con pasión. Me enseñó ha orar en Mixe, me enseñó a perdonar, me enseñó a caminar en la vida con la frente en alto. Me dió tantas enseñanzas, a vivir en libertad, a compartir, a confiar en la gente a tener una esperanza en la humanidad.
Mi abue ante dudas y cuestiones de la existencia misma tenía siempre una respuesta adecuada, no te preocupes, no le pienses mucho, ve y trabaja, ve y viaja, ve y conoce, ve y comparte, en resumen ve y vive.
Ahora que ha partido, siento dolor en el alma, pero también siento mucha alegría y felicidad por los momentos vividos, por las risas compartidas, las historias heredadas, los aprendizajes de vida ejemplares, las grabaciones de los videos que le realicé, las canciones cantadas, los momentos de plática y reflexión profunda, las celebraciones de año nuevo, la valentía en los momentos de angustia y dolor...
"Estuviste aquí donde reiste, donde aconsejaste, donde fuiste autoridad, donde fuiste hija, donde fuiste madre, donde trabajaste, donde viajaste. Hoy que el dador de vida te ha llevado y ha solicitado tu presencia, que te reunas con tus ancestros, con nuestros ancestros, con los que se nos adelantaron. Que los sueños contigo no nos atormenten, no nos castiguen en esta vida. Perdónanos y olvida las onfensas que quizá cometimos contra tí, las malas palabras, las malas acciones, las malas ideas. Cuidanos y en algun momento también nos reuniremos contigo. Hoy que te entregamos a la tierra y al universo, que te acoge en su regazo, que te reuna con los que quisiste y conociste. Ve en paz, nosotros nos quedamos un tiempo más, lo que el dador de vida no otorgue, aquí te recordaremos siempre y en los días de tus fiestas, llega a la casa con tus compadres, comadres, allí te tendremos un lugar para todos. Nos volveremos a encontrar"
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