
Vivimos
entre la felicidad y la tristeza, entre la vida y la muerte, entre la
angustia y la esperanza, tal vez como dualidades contrarias, o tal
vez como complementarias, o tal vez como integralidades de la vida.
Entre un estado pleno y no pleno, pero al final valoramos y decidimos
desde donde nos ubicamos.
Al
estar en un extremo u otro me permitió entender y valorar lo
recorrido, lo vivido, lo andado. Comprender diversas situaciones,
cambiar las cambiables, modificar las modificables y tener conciencia
de las inmutables.
0 Comentarios